¿Recuerdas cuando eras niño(o) lo fácil que resultaba crear con el poder que te daba tu imaginación?.
¿Y que con absoluta seguridad y libertad desde ahí diseñabas y construías lo que te placía?
Quien no imaginaba su gran, gran casa, o que tal el super auto que conducías mientras jugabas? O que dices de la vida fabulosa y divertida que te imaginabas tendrias de grande…? ¿Recuerdas eso?
Cuando eras niño nunca nadie te dijo que podías hacer o que no con tu imaginación. ¿Cierto?
Tu imaginación te pertenecía a ti, hacías, fabricabas, construías, viajabas etc. ¡Con ella creabas cualquier cantidad de maravillas, y disfrutabas hacerlo! Ya que sabias ahí TO-DO era posible.
Ahora bien, imagina que hoy con tu intención y pensamientos tienes el poder de construir, modelar y transformar todo aquello que desees. Y toda esta “construcción” ocurre en una realidad…
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